Almendro
El almendro (Prunus dulcis) es un frutal muy cultivado no por sus frutos sino por sus semillas, las almendras.


Es un árbol muy emparentado con el cerezo, ciruelo, melocotonero, albaricoquero y otros afines, con la diferencia fundamental de que estos se cultivan por su fruto y no por sus semillas.




En el almendro, el fruto que recubre la semilla se seca y se abre, dejando a la vista la almendra, que sería el equivalente del hueso que contienen en su interior los melocotones, ciruelas, etc.


Muy adecuado para el huerto y el jardín
Se trata de un frutal muy interesante, no solo como cultivo comercial, sino que también para formar parte de huertos y jardines.
Por su floración

Además de producir almendras de calidad que se conservan muchos meses como fruto seco, tiene un floración muy temprana y abundante, que creará un auténtico espectáculo de color y atraerá a los beneficiosos insectos polinizadores.
Muy resistente
El almendro es uno de los frutales más resistentes al frío invernal, cuando el árbol se encuentra hibernando y desprovisto de hojas.
Además, se adapta muy bien a climas secos con escasas precipitaciones, por lo que el agua no suele ser un problema para esta planta.
Muy productivo
Un almendro adulto puede dar alrededor de 5 kg de almendras, una cantidad más que sorprendente sabiendo que se trata de sus semillas y no de sus frutos.