Mejor luna para trasplantar

En agricultura biodinámica y en las prácticas agrícolas tradicionales de muchos lugares, se tiene en cuenta la fase lunar a la hora de realizar los trasplantes, ya sea de hortalizas, frutales u otras plantas, y tanto a raíz desnuda como con cepellón.

Sin embargo, como se verá a lo largo de este artículo, no está tan claro en qué fase es mejor realizar el trasplante o si la luna tiene una influencia determinante en esto.

¿Hay una fase mejor para esta labor?

En el artículo sobre la mejor fase lunar para sembrar, se expusieron las conclusiones de un estudio científico en el que se encontró relación entre la fase lunar y la mejor germinación de las semillas de maíz, así como un mayor grosor del tallo, cuando la siembra se realizaba en cuarto creciente o luna nueva.

Pero esto del maíz no se puede aplicar a cualquier planta, como se explica en ese artículo enlazado más arriba, y cómo demuestra otro trabajo de investigación mencionado allí.

Sin embargo, otro estudio llevado a cabo en el seno de la Universidad de Valencia y publicado en 2020 en la revista Agronomy, concluyó que tras analizar la blibliografía específica sobre el desarrollo de las plantas, no se encontró ninguna evidencia científica que respalde la relación entre las fases lunares y la fisiología de las plantas.

En realidad, que no se encuentre evidencia en la bibliografía no significa que no exista, solo que quizás aún no se ha podido probar, puede que por ser una interacción extremadamente débil. En cualquier caso, como piden los responsables de este tercer estudio, no se debería dar por cierto que la luna influye en el desarrollo de las plantas hasta que la ciencia no lo pueda demostrar.

¿Qué dice la biodinámica?

Según las recomendaciones de esta filosofía, en general es mejor realizar los trasplantes a raíz desnuda en luna descendente, es decir, en el periodo en el cuál la luna va apareciendo cada vez más baja en el cielo. Esto es lo que dice, aunque generalmente en la práctica se suele tomar como bueno el periodo de la luna nueva al cuarto menguante.

Además, se acepta que para las plantas cuya parte comestible es el fruto, el trasplante debe realizarse cuando la luna pase por delante de las constelaciones de fuego, es decir, Aries, Leo y Sagitario.

Sin embargo, cuando en su recorrido pasa por delante de las constelaciones de tierra (Tauro, Virgo y Capricornio), se dice que mejora en elraizamiento de las plantas que se trasplantaron previamente.

Por otro lado, la biodinámica sostiene que las estaciones del año se proyectan también a lo largo de cada día, de forma que de madrugada se asemejaría al invierno, por la mañana a la primavera, al mediodía al verano, y por la tarde al otoño. Ciertamente las condiciones ambientales son semejantes. Pues bien, teniendo en cuenta esto, se recomienda realizar los trasplantes por la tarde, en lo que sería el otoño diario.

¿Cuándo es mejor trasplantar realmente?

Por suerte o por desgracia la biodinámica no es una ciencia y, por tanto, no puede tomarse como algo cierto, sino más bien como una filosofía, forma de ver o hacer las cosas en base a unas creencias personales, que a su vez se suelen basar en emociones.

Dicho esto, ya se ha dicho más arriba que algunos estudios científicos han demostrado cierta relación entre las fases lunares y la actividad de determinadas plantas. En el siguiente artículo se ahonda más en esto.

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Entonces, ¿hay que tener en cuenta la luna para realizar los trasplantes o mejor no? Pues, como se dijo en el artículo sobre la mejor luna para sembrar (enlazado al inicio), existen otros factores más importantes que el efecto que pueda tener la luna, que de existir será muy débil.

Por ejemplo, por mucho que se realice el trasplante en el momento más idóneo según la biodinámica, no servirá de nada si la raíz de la planta está dañada, o si se planta en un suelo seco, un día caluroso y no se riega y se protege del sol. Tampoco resultará cuando se trasplante a un sustrato o suelo inapropiado para el desarrollo de la planta, o a una ubicación en la que no se den las condiciones de luz, temperatura y humedad que la planta requiere.

Todos esos factores, y otros como el abonado, la poda, la época del año, etc, tienen mucha más influencia en el éxito o fracaso del trasplante que la fase lunar.

Conclusión

La mejor luna para trasplantar es aquella en la que coinciden todas o la mayor parte de estas cosas:

✔ La época del año es la correcta; otoño, invierno, primavera; según el tipo de planta.

✔ El estado de la planta es bueno como para soportar un trasplante, especialmente si este es a raíz desnuda y en el exterior.

✔ Las condiciones ambientales son favorables, es decir, con poco sol, poco viento, alta humedad.

✔ El suelo o el sustrato reúnen las condiciones apropiadas para el desarrollo de la planta.

✔ El equilibrio entre la parte aérea y las raíces es adecuado, es decir, que si la planta ha perdido una cierta cantidad de raíces, habrá que podar la parte aérea de forma equivalente.

✔ El mantenimiento tras el trasplante es posible, es decir, se va a tener tiempo para cuidar la planta, para ver si evoluciona bien, si necesita más agua o cubrirla con un plástico para reducir la evaporación, etc.

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